Esta ama BDSM no juega de ninguna manera. Es su campo y su sugar baby debería saberlo. Se arrepiente de haberse casado con esa mujer porque ella lo domina en la cama. No está oculto que esta femdom no tiene miedo de usar el poder que tenga para conseguir lo que quiera. Disfruta mientras regaña a su sugar baby por no seguir sus órdenes como una buena putita.